PFAS free
El PTFE es PFAS free
Las PFAS son sustancias químicas sintéticas, conocidas como «químicos eternos», que no se degradan y se encuentran en el medio ambiente, la vida silvestre y el cuerpo humano. Se han utilizado desde la década de 1940 en una amplia gama de productos, como envases de alimentos, pinturas, espumas contra incendios y cosméticos. Debido a su persistencia, se han relacionado con una variedad de problemas de salud, como efectos negativos en el sistema inmunológico, el hígado y el colesterol.
En enero de 2023, Alemania, Dinamarca, Países Bajos, Noruega y Suecia presentaron ante la ECHA (Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas) una propuesta de restricción de todos los PFAS en el marco del reglamento REACH.
Esta propuesta busca prohibir la fabricación, uso y comercialización de sustancias PFAS, excepto en usos considerados esenciales.
En 2024–2025, la ECHA ha recibido más de 5000 alegaciones de empresas y asociaciones industriales.
La decisión final de la ECHA se espera no antes de 2026.
Impacto específico de la restricción de los PFAS sobre el PTFE
El PTFE (politetrafluoroetileno) —el material base de las piezas de BEXIFLON— es técnicamente un polímero de fluor y, por tanto, entra dentro de la definición general de PFAS.
Sin embargo, hay un matiz crucial, la diferencia entre “PFAS polimerizados” y “PFAS procesables o intermedios”
• Los monómeros usados para fabricar el polvo de PTFE sí son PFAS peligrosos.
• Pero el PTFE sólido polimerizado utilizado por BEXIFLON en todas sus piezas es químicamente inerte, no tóxico y no migrante, por lo que no supone riesgo directo para la salud ni el medio ambiente.
Por eso, la propia ECHA considera excepciones para polímeros altamente estables como el PTFE, siempre que se controle su producción y los residuos.
El PTFE será considerado formalmente un PFAS, pero no será prohibido. Su uso seguirá permitido bajo control y justificación técnica, especialmente en aplicaciones industriales donde no hay sustituto viable.
